No sólo es salir a marchar en defensa de gobierno del cambio en cabeza de Francia y Petro. El martes (y siempre) la tarea, más que salir a la calle, es defender la decisión tomada el pasado 19 de junio al votar por un gobierno de paz y de transformaciones profundas.
Salir a la calle o ir a concentraciones el 14F también es para decirle a la Colombia Humana que, si no se pone las pilas de aquí al 19 de abril, esas apuestas derechistas y malignas en la política, no necesitaran de otro fraude el próximo 29 de octubre por cuanto encontraran la bandeja servida y con papaya lista.
Salir a marchar mañana 14 de febrero es para decirle a los amigos del Pacto Histórico que, si no se pellizcan en la juntanza política para definir las tareas electorales que el avance del gobierno del cambio y la consolidación de la paz total exigen, el 29 de octubre la tendrán dura, porque el ambiente de peleas y rupturas de hoy en esa coalición les permitirá a los enemigos de paz y de las reformas, hacerle una marranada a la democracia, a la justicia social y a la paz.
Entonces, este 14 de febrero la invitación es a concentrarse en la tarea de defender las puertas ya abiertas en el camino de la paz, afianzar las decisiones contra la descarada corrupción, y naturalmente irnos preparando en cada municipio y departamento colombianos, como nuevos territorios para hacer y el gobierno de la paz, y desde ahora organizar los Concejos y Asambleas Admirables, instrumentos básicos de la coadministración con buenos alcaldes y buenos gobernadores.
Por eso de ser gobierno local, si vale la pena salir a marchar el martes 14F.